Le toca al Presidente Mulino la titánica labor de recuperar la confianza y seguridad jurídica que gozaba el país antes de que llegara Varela. Ese es el reto más grande que va a tener el presidente para que vuelva a llover chen chen en Panamá
El ex ministro de la Presidencia, durante la gestión Martinelli, Jimmy Papadimitriu, se refirió a través de su cuenta de X, en relación a la situación económica que vive el país, considerando que lo primero es lograr que nacionales crean e inviertan en Panamá.
«Muchos gobiernos y gurús de la economía creen que atrayendo inversión extranjera es la clave del éxito para una economía. Pero en realidad es que nadie de afuera va invertir su dinero en Panamá si los propios panameños no creen en su país», destacó Papadimitriu.
A su juicio, en vez de salir a buscar la inversión afuera, primero se debe buscar que los los nacionales inviertan. «Para eso, hay que devolverle la confianza y seguridad a los inversionista que su inversión va ser respetada».
Agregó que la desconfianza en la inversión, tanto nacional como extranjera, empezó con el gobierno de Juan Carlos Varela cuando decidieron perseguir a empresas panameñas como SOHO Mall, La Riviera y otras; mientras tanto su gobierno se estaba acostando con los chinos. «Persiguió al gobierno de Martinelli y a muchas empresas privadas que no tenían nada que ver y las que sí tenían que ver no las persiguió porque tenían “acuerdos”.
El ex ministro recalcó el hecho de como Varela tenía al Ministerio Público como un departamento de facturación y cobro de salvoconductos a su antojo. «Hacía lo que le daba la gana con su escuadrón de terror. Eso lo único que ocasionó fue un desbalance económico en el país porque le metió miedo al inversionista».
En esta dirección recordó que con la llegada al poder del ex presidente Cortizo, no atendió la falta de seguridad jurídica en el país, no le devolvió confianza al inversionista, cayó la pandemia y muchas empresas no se recuperaron. «Cerraron la mina por la inoperatividad del Gobiernito que se canalizó hacia un rechazo minero».
Para el también estratega político, aquello fue otra luz de bengala a los inversionistas extranjeros de que aquí se podía invertir ocho mil millones y de la noche a la mañana le cerrabann su inversión, calificándolo de actos que generan desconfianza e inseguridad jurídica en nuestro país.
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