Por: Alfonso Fraguela
Debo felicitar al presidente José Raúl Mulino, quien, aunque algo tarde recurrió a los jefes de la fe para que intervinieran como mediadores, en Bocas del Toro.
Aún recuerdo que en campaña expresó, el entonces candidato expresó “El Gobierno es el que manda y si se equivoca vuelve y manda”, entrevista dada a la Periodista Adelita Coriat el 5 de abril de 2024.
Muchos quizás quedaron algo confundidos por lo que se dijo y el alcance de esas palabras. Lo cierto es que el mensaje fue que el gobierno lo dirigen personas y como seres humanos pueden errar y rectificar a sus errores.
Actualmente a pocos días de conmemorar el primer año de gestión del gobierno Mulino, podríamos destacar que la ventaja con la que asumió el poder ha empezado a reflejar deterioro.
El primer tropiezo lo enviaron desde los Estados Unidos, cuando se debatían en una Campaña Presidencial y las amenazas de retomar el Canal de Panamá incluso a la fuerza, despertó el nacionalismo dormido de muchos ciudadanos, que amán esta Patria.
Las constantes visitas con amenazas de emisarios de Trump, y la forma como se manejó el tema con una reserva absurda e incoherente por ser un tema nacional, fue debilitando la confianza ganada por el jefe de gobierno.
A esto se sumó la ley de la CSS y el tema Minero cuya ley había sido declarada inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia del 28 de noviembre de 2023.
El tratamiento de estos temas y un memorándum de entendimiento en dos versiones (inglés y español) que no fueron homologadas, resquebrajó aún más la confianza en el gobernante.
Lo que nos ha mantenido en un ambiente de zozobra, empezando la población a olvidar los desatinos escándalos del expresidente Cortizo y su grupo que debieron ser investigados por la actual procuraduría, dejando la percepción de continuidad que el pueblo no quería antes de las elecciones pasadas.
El presidente José Raúl Mulino, necesita refrescar su imagen y para ello, frente a estos temas latentes que lo han expuesto, son pocos los ministros que han salido a defenderlo, ocasionado un desgaste en tan corto tiempo.
Terminar el periodo de cinco años con un país como esta, traerá mayores problemas sociales que demoraran décadas en ser solucionados.
Es por ello, que le sugiero efectuar cambios profundos en su gabinete, porque, aunque muchos digan yo no creo en las encuestas, éstas son instrumentos de medición efectivo que le toma el pulso al sentir del pueblo.
Las encuestas no las pueden hacer con los aduladores, o quien espera o esta sacando un provecho por estar cercano a los círculos de poder. Porque, seguramente le dirán que en el país no pasa nada.
El Estado no se puede convertir en una agencia de empleo, pero si debe crear las condiciones apropiadas para la inversión extranjera, que generen empleos que le brinden tranquilidad y estabilidad en su familia.
Para lograr ese fin hay que tener paz social, y recobrar la confianza en su equipo hay personas que solamente han aparecido el día que fueron nombrados ministros de Estado, mientras hay otros funcionarios, que iniciaron una campaña presidencial 2029 compitiendo con su imagen de jefe de gobierno.
Quien quiera hacer política, que la haga desde la esfera privada con los recursos personales y no empleando recursos estatales para hacerse una imagen y un nombre.
