Por: Alfonso Fraguela
Los tiempos electorales, han empezado a definir un camino algo claro para las próximas elecciones del 5 de mayo de 2024. Sin embargo, la figura de Alianza Territorial sigue generando algún grado de confusión dentro del elector, pues aún no entiende de forma simple lo que deben hacer.
Tres partidos opositores anunciaron la firma de un acuerdo político en este tenor, y hablamos del Partido Cambio Democrático, el Partido Panameñista y el Partido Popular.
Esta Alianza es sobre cargos inferiores al de Presidente de la República donde los colectivos mantienen su independencia para el cargo de Jefe de Gobierno. Para el CD y el Panameñismo la cabeza de la oferta electoral es Rómulo Roux, mientras que en el Partido Popular y el Movimiento Panamá Posible lo lidera Martin Torrijos Espino.
Lo que han expresado estos aliados con respetoa la Alianza Territorial, fue que con ello se busca postular para Alcaldes, Diputados y Representantes de Corregimiento nuevas opciones que permitan competir y de esa manera, evitar la forzada necesidad de elegir lo que los partidos tradicionales quieren obligar a elegir.
Esta maniobra política permitida por la ley electoral, podría generar complicación haciendo que para la cabeza de la oferta electoral voten por un candidato presidencial que no es el de su preferencia.
La medida es interesante, pero por el tiempo restante para la celebración de las elecciones resulta mínimo y en consecuencia para aclarar el mensaje, pudiendo ocasionar desorientación.
Igualmente, esta figura muy de boga en las últimas semanas la están explorando otros colectivos como el PRD, MOLIRENA, ALIANZA, Y RM.
En el caso de la Alianza PRD-MOLIRENA que impulsa José Gabriel Carrizo para la presidencia, y en el caso de RM y ALIANZA que impulsa la candidatura de Ricardo Martinelli han evaluado la posibilidad que diputados del PRD vayan con la bandera de otro partido que impulse a otro candidato presidencial distinto al del partido de cuna al cual pertenecen.
Esta figura, nos recuerda que cuando los cargos inferiores están en peligro, entonces los candidatos te dicen “vota por mi para tal cargo y para presidente por quien quieras”.
Entendemos perfectamente que se trataría de una supervivencia política en este último supuesto, porque el desgaste que sufre el gobierno lo recibe como un legado quien es postulado por éste o los colectivos afines.
Pero la efectividad de esta puesta en práctica, la veremos en los resultados del 5 de mayo de 2024.