El funeral privado ha congregado a 2.500 personas.
El funeral del ex primer ministro nipón Shinzo Abe ha congregado a 2.500 personas este martes en el templo budista de Zojoji en Tokio. La ceremonia, de carácter privado para allegados del político, ha concentrado a numerosos ciudadanos con intención de presentar sus respetos.
El templo ha permanecido cerrado al público en su mayor parte, salvo un área donde se permitía a los visitantes acudir para presentar ofrendas florales frente a un retrato fotográfico de Abe.
Al acto, celebrado por el rito budista, han asistido miembros de la familia y figuras políticas cercanas al fallecido líder, entre ellas el actual primer ministro nipón, Fumio Kishida, o Toshimitsu Motegi, el secretario general de su formación, el Partido Liberal Democrático (PLD).
En torno al templo, protegido por un amplio dispositivo de seguridad, se han vuelto a congregar numerosas personas, después de que el lunes acudieran muchos ciudadanos a rendir homenaje a Abe en el velatorio celebrado en el mismo templo. Al velatorio acudieron figuras destacadas de la política y el sector privado japonés, así como dignatarios extranjeros de diversos países.
Después del funeral, el ataúd con el cuerpo de Abe ha sido transportado en coche en una ruta por lugares clave en su carrera política, como la sede del PLD, la oficina del primer ministro y el edificio de la Dieta (Parlamento) nacional.
Se espera que más adelante tenga lugar un acto de homenaje público al fallecido, aunque la fecha y el lugar están aún por determinar.
“El primer ministro ha dejado muchos méritos y consideramos que se debe pensar con respeto en la forma de homenajearlo. Pero aún no está decidido, lo estudiaremos en base a otros casos previos y según la voluntad de su familia“, ha dicho este martes en rueda de prensa el portavoz del Ejecutivo, Hirokazu Matsuno.
Asesinato de Abe
Shinzo Abe falleció el pasado viernes en un atentado después de recibir varios disparos en la ciudad de Nara durante un acto de campaña para las elecciones parlamentarias del domingo, en las que el Partido Liberal Democrático (PLD) de Abe y del primer ministro, Fumio Kishida, revalidó su amplia mayoría.
El ex primer ministro estuvo hospitalizado durante aproximadamente cuatro horas en el Hospital Universitario de Nara, al que fue trasladado en helicóptero. Los médicos trataron de detener sus hemorragias en el cuello y pecho y le realizaron transfusiones de sangre sin lograr salvar su vida.
El presunto asesino, un exmiembro de las Fuerzas Marítimas de Autodefensa (Ejército nipón), de 42 años, fue detenido tras el suceso. Según las pruebas recopiladas tras los hechos por la policía nipona, el presunto asesino comenzó a planear su atentado contra el ex primer ministro el pasado otoño y llevó a cabo minuciosos preparativos para el ataque.
Por RTVE.es/EFE
