El candidato, ex legislador y destacado periodista anticorrupción, fue asesinado a tiros en Quito el 9 de agosto.
El Departamento de Estado de Estados Unidos, ha anunciado una recompensa de hasta cinco millones de dólares por información que ayude a dar con los cabecillas responsables del asesinato del candidato ecuatoriano Fernando Villavicencio el pasado agosto, durante un acto de campaña en Quito.
También ha ofrecido hasta un millón de dólares por información que posibilite la identificación de miembros de alto rango del grupo criminal responsable del asesinato del candidato.
“Estados Unidos continuará apoyando al pueblo de Ecuador y trabajando para llevar ante la justicia a individuos que buscan socavar los procesos democráticos a través del crimen violento“, ha dicho el secretario de Estado, Antony Blinken, en un comunicado.
El FBI asiste a Quito en la investigación del magnicidio, después de que las autoridades ecuatorianas arrestaran a seis colombianos que se piensa son parte de un grupo criminal organizado.
Asesinado a dos semanas de las elecciones
Villavicencio, ex legislador y destacado periodista anticorrupción, fue asesinado a tiros en Quito el 9 de agosto, menos de dos semanas antes de las elecciones presidenciales.
El candidato, periodista de 59 años, se había convertido con sus investigaciones sobre corrupción en uno de los enemigos más acérrimos del expresidente Rafael Correa (2007-2017).
A raíz de las amenazas recibidas semanas atrás de grupos de narcotraficantes, Villavicencio se movía con escolta policial.
Su asesinato se produjo en mitad de una escalada de violencia en Ecuador por la acción de bandas criminales, que también se ha cobrado la vida del alcalde de Manta, Agustín Intriago, y de un candidato a diputado por la norteña provincia de Esmeraldas.
Ecuador cerró 2022 con la mayor tasa de muertes violentas de su historia, al registrar 25,32 por cada 100.000 habitantes, la gran mayoría asociada, según el Gobierno, al crimen organizado y al narcotráfico, que ha ganado fuerza en la costa y ha convertido los puertos en grandes trampolines para la cocaína que llega a Europa y Norteamérica.
Noticias RTVE.es
